20040229

2555 Lejano y distante

No disturbes la tranquilidad
De mis estanques
No muevas ni una hoja
Del follaje,
Déjame así
Lejano y distante
Porque bien yo comprendí
Que a mi
Sólo vienes
Cuando precisas alpiste,
Pero mis manos están
Ya prontas a cerrar.

Este árbol en mi pecho
Era una ofrenda de amor
Hacia ti...
Para que comieras de él
Cuanto quisieras,
Guarecerte bajo mi sombra
Y que tus alas de alondra
Encontrasen entre mis ramas
El diván reclinatorio
Y el edredón de seda.

Quise ser descanso
A tus delirantes suspiros
Y que sirvieran mis palabras
De colirio
Para tus ojos.

Pero sólo vienes
Cuando precisas alpiste,
Pero mis manos están
Ya prontas a cerrar.

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