Se deshace el nudo que me ata
A tu vida y tu verdad.
Alborotado está mi pelo
Por la angustia y por el viento.
En mis ojos puede verse
Un querubín que aletea en el suelo.
Un ángel que pierde sus alas en la mar.
Albatros pelágico sin plumas.
Soy bandada de estorninos
Murmurando soledad.
Angustiado está mi pecho
Me late un mal presentimiento.
En mi cuerpo puede oírse
Un serafín revoloteando bajo el cielo.
Torpe polluelo que no sabe volar.
El ojo del águila entre la bruma.
Soy parvada de gorriones
Piando su orfandad.
Siento oscuras mis paredes y mi techo
Y ausente tu amor entre mis sentimientos.
En mis manos puede leerse
Un Icaro cayendo en pleno vuelo.
Inútil pecho que no sabe amar.
Un tosco pingüino entre las dunas.
Soy camada de suspiros
Ventilando su incapacidad.
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