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20220626

4745 Párpado del pulpo

Mi corazón va
Como el insomne
Párpado del pulpo 
Que no se cierra jamás.

Allá dentro
Hay una barca 
Con una pequeña 
Lámpara y una luz 
De lumen infinito,
Afincada en el futuro
De la dulce hora 
Cuando a tu lado 
Duerma relajado
Y tiernamente feliz.

20200105

4323 Un perro famélico aúlla un afligido blues

Mi estado de ánimo es
Un perro famélico que no da,
Ni para lanzar un aullido
De emergencia,
Para esbozar un urgente
Alarido, sólo bosteza
Hambriento,
Lejos de la felicidad.

De mi pecho cuelga,
Como un cotiledón,
Un anaranjado sol
A la hora del ocaso
Y mi sentimiento es
El de un tonto en las apuestas
Que ilusionado piensa
Que le favorecerá el azar.

El arcano mayor lo ha dicho
Groseramente:
La ópera ha concluido,
Se bajan los párpados
Como blinders en el ventanal,
Se curvan las comisuras
De mi rostro
Y en el íntimo
Azul oscuro
De todo mi ser
Un perro famélico
Aúlla un afligido blues.

20180623

2018.06.23 3981 Tú hiciste una asociación con las larvas del dolor

Para que desencadenase en la apoteosis de mis amarguras
Tú hiciste una asociación con las larvas del dolor.

No podía evitar mirarte mientras avanzabas en mi dirección
Pero no fuiste más perra que yo
Y te dejé acercarte sosegadamente
Sin que mis párpados temblaran por el temor.

Como en aquella escena del libro de Isaías
Tú venías desde lo hondo de mi interior
Con tu vestido rojo,
Inclinándote en la plenitud de tu fuerza
Como el atleta cósmico,
Como el portento discóbolo de Mirón,
Y lanzaste tu disco solar,
Tus dardos de nieve contra mi parasol.

No podía evitar mirarte mientras avanzabas en mi dirección
Pero no fuiste más perra que yo
Y te dejé acercarte sosegadamente
Sin que mis párpados temblaran por el temor.

Para hacer desencadenar la apoteosis de tus amarguras
Fui consubstanciación con las ponzoñas del amor.

20180609

2018.06.09 3967 Yo intenté cerrar mis párpados

Yo intenté cerrar mis párpados
Para retener la imagen
Con la que el fuego
De tu iridiscente presencia
Vino hasta mis fronteras.

Fuiste una luz
Por los predios de Tunguska.

Un fulminante rayo
Sobre la torre de Babel.

Mis ojos cada día ven menos
A causa del fulgor
De tu mirada.
Ya te vi. No quiero nada.

No es preciso continuar
Con este insistente mirar
Que ya hambriento he devorado
Tu centelleante figura.

Fuiste el destello de Damasco
Desviando el camino de Saulo de Tarso.

Fuiste llamarada interestelar
Que chamusca.

Y en vano intenté cerrar
Mis párpados para retener
La imagen
Con la que el fuego
De tu iridiscente presencia
Vino hasta mis fronteras.