Tu desprecio
Hacia las florecillas
De mi jardín
Es tan inquebrantable
Como el diamante
En la escala de Mohs.
Es el símil
De un vendaval
De categoría cinco
En la serie de Beaufort,
Una navaja polar
Que parte en dos
La tibieza de mi corazón.
Es como la lava ardiente,
Los piroclastos y lapilli,
Urticante magma y el lahar;
Un vikingo despiadado
Desembarcando
En las apacibles
Orillas de mi mar.
Navega en contra de mi felicidad,
Envolviendo las cumbres más altas
De mis ilusiones
En un frío glacial.
Es un terremoto que sacude
Los cimientos de mi ser
Con la máxima intensidad
De Richter,
Un pozo sin fondo
Tan oscuro y abismal
Como el océano más profundo
En la fosa de las Marianas.
Es un eclipse total,
Que cubre con su umbra,
Su penumbra y antumbra,
Cualquier indicio de luz
En el espacio de mi interior.