Como una bestia taimada
Que acecha su desafortunada presa
Detrás de las puertas
Agazapada en las sombras,
Así veía tu sonrisa y tus ojos
Cuando me decías que me amabas
Como nadie me amará.
Sabía perfectamente
Que no eras la misma
Que conocí en el ayer
Y que al pasar el tiempo
El rubor de tus ojos
Había cambiado ante mí.
No se por qué terminó
El amor que compartimos
Durante tanto tiempo,
Pero al ver tu sonrisa y tus ojos
Al decirme que me amabas
Lo que notaba era
Un brillo excesivo
Semejante al de una bestia taimada
Que acecha su desafortunada presa
Detrás de las puertas
Agazapada entre las sombras.
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