Este caballo sin frenos
De mi intranquilo pecho
De improviso dejó de latir
Y mis exánimes ojos
De magdalena cancelaron
El contrato exclusivo
Con las aguas y la sal.
Ya no es posible estampar
Mi aliento sobre el glaciar,
Ni mezclar entre mis dedos
El rocío y el fotón.
Todo concluye
Todo acaba, fenece, muere.
Y ahí vas
Con mi vida a cuestas,
Con cada una de mis ansias,
Con lo desorbitado de mis miradas
Mis ojos saltan de sus cuencas,
Y las alegrías se evaporan
De mis venas.
Este caballo sin frenos
De mi intranquilo pecho
De improviso dejó de latir
Y mis exánimes ojos
De magdalena cancelaron
El contrato exclusivo
Con las aguas y la sal.
Ya no es posible estampar
Mi aliento sobre el glaciar,
Ni mezclar entre mis dedos
El rocío y el fotón.
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