La soledad maliciosa
Se multiplicaba prontamente
Como la polilla en ropa vieja
Dentro de mi corazón
Ignorando toda cláusula
De nuestro común acuerdo
Cuando me propusiste
Que tenías que partir
Y yo te dejé marchar
Porque quería probar
Que te amaba de verdad
Quería verte volando
Por los azules cielos
Libre como la brisa del mar
Y así saber si mi amor
Llegó hasta tu ser
De la forma que creí
Que había llegado a ti
De una forma que se graba
Indeleblemente en el corazón
Si me amabas de a de veras
Volverías a mi sin duda
Si no me amabas de a de veras
Tus alas se fortificarían
Entre la espuma blanca de la mar
Y las nubes que parecían de algodón
Y dejarías entonces
Entre mi corazón solitario
Una artimaña desconsoladora.
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