Dedico mi pasión
A tu beso primigenio
Y tu portátil flor.
Que desesperadas
Mis luciérnagas
Se esconden
Inútilmente
En tu oscuridad.
Y mi interior
Que por tanto tiempo fue
Un baúl cerrado
A la ilusión
Ahora está abierto
A tu corazón.
Un baúl
De blancas perlas
Escondidas por las eras
Ya pasadas,
Ajadas
Por la desilusión.
Dedico mi razón
A tu beso inaugural
Y tu caricia en flor.
Que desesperadas
Mis luciérnagas
Se esconden
Inútilmente
En tu oscuridad.
Y mi interior
Que por tanto tiempo fue
Un baúl cerrado
A la ilusión
Ahora está abierto
A tu corazón.
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