Cuando como un náufrago te vi
Alejarte de mi isla solitaria,
Como si fueses maratonista olímpico
Que se desplaza
Hacia una meta desconocida,
En mi sediento y yermo ser,
Desértico y árido por dolor
Se desencadenó como por conjuro
Un diluvio oceánico de desesperación.
Yo quería que mis manos
Fuesen ramas de baobab
Para tocar tus nubes,
Yo quería que de querube
Mis pies tuvieran alas
Y alcanzarte,
Para besar tu pecho
Con la ternura
Más insana que mi capacidad
Me hubiese permitido ultrapasar.
Pero como un náufrago te vi
Alejarte de mi isla solitaria,
Como si fueses lo mismo
Que maratonista olímpico
Que fugaz se aleja
De la escena
En donde habría podido salvar
Un náufrago de cordura,
Iluso huérfano de tu amor,
Un extraviado hijo de la ternura,
Abandonado despojo del dolor.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario