Con una espantosa hambre de tu cuerpo
A la hora de los perros
Desperté,
Pero te habías ido por mi ventana
Como si hubieses sido
El aire que transpiro,
Y créeme que me cuesta confesarlo
Pero como si fuese un pulpo
Con hambre en alta mar,
Tuve que comer mi propio cuerpo
Para poder apaciguar
Ese monstruo que despertó
Como si fuese Godzilla,
A la hora de los perros
Buscando de tu pasión
Y pensé que debía de tener
El Diablo dentro,
Porque esa llama tan exagerada
Que no podía ser apagada
Ni siquiera con el mar
No podía ser normal
En un espíritu humano.
Porque la espantosa hambre
De tu cuerpo
Hizo que me despertara
A la hora de los perros,
Pero tú ya no estabas
Porque estabas
En los brazos de la luna.
Entonces como si fuese un pulpo
Hambriento en alta mar
Tuve que devorar
Mi propio cuerpo,
Para poder calmar
Ese monstruo que como Godzilla,
A la hora de los perros
Despertó
Buscando de tu pasión.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario