Con mi linterna interna
Caminaba y caminaba
Al borde del precipicio
En donde la soledad
Extrema
Me acorralaba,
Por varios instantes
La desesperación me empujó
Por la espalda
Estuve a punto de perder
Mi cuerpo espíritu y alma.
Náufrago de la alegría
Mi corazón estaba
Refugiado en el dolor
Mi pecho suspiraba
Abandonado de dios
De mis amigos, de mi casa
Por eso con desesperación
Me aferré a tu mirada
Esperando recibir
Sólo algunas migajas
Por eso cuando me invitaste
A banquetear de tu alma
Mi espíritu se regocijó
Y comenzó en mi
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