El desafinado violín de mi corazón
Tiene tres cuerdas rotas
Y esto me causa un dolor
Tan vasto y enfermizo
Que reo que de esta vez
No me quedará más que morir
Y no es por pesimista
Que me quejo de mi desgracia
Sino porque tu risa
Era el fundamento de mi calma
Tu caricia era el basamento
De mi amor
Y tus ojos eran las luces
Con que se guiaba mi alma
En esas noches de tormenta
Pero cuando te alejaste de mí
Empezó una extraña descomposición
De todo mi humano ser
Que me hizo despojarme
Incluso de mis sentidos
Y quedó mi corazón tan frágil
Que la música que le brotaba
Era tan desatinada y torpe
Que al querer sobreponerme
Y tocar tonadas alegres
Tres cuerdas quedaron rotas
La primera porque tu risa
Era el fundamento de mi calma
La segunda porque tu caricia
Era el basamento insustituible
De mi amor
Y la tercera porque tus ojos
Eran las fulgurantes luces
Con que se guiaba mi alma
En esas noches de tormenta.
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